El ahorro es un hábito que se debe trabajar día a día y que requiere de constancia y dedicación.
El ahorro es un hábito que se debe trabajar día a día y que requiere de constancia y dedicación.
El primer paso consiste en elaborar un plan de ahorro y un proyecto a corto, mediano o largo plazo. Es importante que determines tu objetivo para después poder establecer un plan de acción que te permita alcanzarlo.
Una de las técnicas de ahorro consiste en comenzar con acciones pequeñas, que pueden parecer insignificantes, como eliminar ciertos gastos diarios innecesarios. Esto puede ir desde dejar de comprar café camino a la oficina, hasta tener un mayor cuidado en apagar las luces de tu domicilio.
Estas pequeñas acciones te permitirán tener una disponibilidad de recursos mayor y podrás dedicar este excedente al ahorro.
Adicionalmente, será recomendable comenzar a establecer ciertos parámetros; como destinar un mínimo del 10% de tus ingresos al ahorro; sin embargo, si logras que sea un 30%, los frutos de este plan de ahorro serán mucho más efectivos.
Por otro lado, es importante que definas los vehículos de ahorro que deseas utilizar; es probable que en un inicio puedas simplemente guardar el dinero excedente en efectivo, pero si en realidad quieres que tu dinero crezca, deberás elegir alguno de los productos financieros disponibles; esto va desde una cuenta de ahorro hasta inversiones de plazo fijo, instrumentos de deuda, fondos de inversión o, incluso, el mercado de capitales.
Recuerda que el ahorro no debe ser un asunto temporal, debes crear el hábito para que se convierta en parte de tu vida.
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